Lunes 19 de Febrero 2024
FÓRMULA 1

Diseñó el coche en el que murió Senna, casi va a la cárcel y ahora trabaja con Checo Pérez

El personaje en cuestión afirma que se siente responsable de la muerte del piloto, pero no culpable.

F1.El ingeniero que casi va a la cárcel y ahora trabaja con Checo PérezCréditos: Especial
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El bien y el mal, una de las grandes dicotomías de la vida. El deporte nos ha regalado momentos increíbles a lo largo de la historia, pero también tragedias que no podemos pasar por alto, esta vez hablaremos de alguien que diseñó el coche en el que murió Ayrton Senna, que casi va a la cárcel y ahora trabaja con Sergio ‘Checo’ Pérez.

El personaje en cuestión es Adrian Newey, quien estudió aeronáutica en la Universidad de Southampton para luego convertirse en uno de los ingenieros más reconocidos de la Fórmula 1 por la tremenda capacidad para desarrollar monoplazas ganadores, aunque no ha estado exento de la polémica en su prodigiosa carrera.

El británico puede presumir de múltiples campeonatos de constructores, en la actualidad es director técnico de Red Bull Racing, un puesto que se ocupa de diseño, producción, prueba, inspección y trabajo en circuito del auto, además, ha inyectado mentalidad ganadora en el equipo; tiene comunicación de primera mano con el mexicano y con Max Verstappen.

“Aunque nuestros diseños son más bien un esfuerzo colectivo en la era moderna, cada coche de Red Bull Racing sigue conteniendo las filosofías y conocimientos distintivos de Adrian. Con otro gran cambio aerodinámico en el horizonte, esas habilidades nunca han sido tan apreciadas”, se lee en la página de la escudería.

¿Por qué señalaron a Adrian Newey de la muerte de Ayrton Senna?

Uno de los episodios más oscuros de la F1 se presentó en el GP de San Marino de 1994 con el fallecimiento de Ayrton Senna tras una supuesta falla en la columna de dirección del monoplaza Williams que Adrian Newey había diseñado junto con Patrick Head.

En el terrible accidente se puede apreciar que el piloto chocó a más de 300 kilómetros por hora en el muro de Tamburello de Imola si poder hacer nada para girar el volante.

"De lo que me siento más culpable no es de que un posible fallo de la columna de dirección fuera la causa del accidente, porque ese no es el caso, sino porque fallé en la aerodinámica del coche", relató el ingeniero en su autobiografía. 

El británico fue demandado por la justicia italiana por homicidios involuntarios, aunque años más tarde fue absuelto y afirma que se sentirá responsable por la muerte del brasileño, pero nunca culpable.