Cruz Azul es el rey de copas. En el partido que reunía a los dos últimos campeones de la Liga MX, el equipo celeste se consagró como el mejor equipo del futbol mexicano. Lo hizo ante un León desconocido, caminando sus primeros pasos con Ariel Holan, y entregado en el resultado por los goles de Jonathan Rodríguez.
La Máquina, con la base del torneo anterior, dominó y jugó como lo sabe hacer desde que el peruano Juan Reynoso es su técnico: vertical, ofensivo, intenso, con sacrificio y una defensa inquebrantable. Incluso, tras la expulsión de Yoshimar Yotún por doble tarjeta amarilla.
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Los goles de 'Cabecita' Rodríguez hicieron memoria. Todo en un lapso de siete minutos, del 60' al 67', suficiente para demostrar que este equipo no necesitó de refuerzos para sentirse importante. Bastó con mantener la base, y los valores inculcados por Reynoso, para seguir avanzando por más campeonatos.
Algo pareció desajustarse con la tarjeta roja a Yotún, Sobre todo, por el gol que vino enseguida de Santiago Ormeño, al 82', en la jugada posterior a la salida del peruano y cuyo efecto provocó nerviosismo entre los aficionados celestes.
La tranquilidad, sin embargo, se las dio la inteligencia de los elementos de La Máquina: jugadores con oficio y experiencia al sufrimiento. "Si no se sufre, no es Cruz Azul", dice un viejo adagio, muy común en las charlas que rodean al equipo. Y es así. Porque, a pesar de ser y sentirse superior, el equipo de La Noria no pudo sacudirse el nerviosismo para conseguir el campeonato.
Un mes y 18 días después de conseguir el título del Guardianes 2021, Cruz Azul volvió a dar otra vuelta olímpica. Lo hizo en Estados Unidos, con dos goles de Jonathan Rodríguez y la dirección técnica de Reynoso. Y, de paso, rompiendo otra sequía: no era Campeón de Campeones desde hace 47 años, en la temporada 1973-74.
AJ