Sin duda, Luis Romo se ha convertido en uno de los baluartes de Martín Anselmi para llevar al Cruz Azul a las semifinales del Apertura 2024 contra las Águilas del América, aunque pocos o casi nadie se imaginaría que fue pescador, hasta que finalmente el destino lo convirtió en futbolista y ahora hasta podría erigirse campeón con La Máqiuina.
Así como lo leíste: Luis Romo y su hermano Darío fueron los encargados de darle un giro inesperado a la tradición familiar de ser pescador por generaciones, específicamente de ostión, para gracias al papá del Chuletita Orozco convertirse en futbolistas, ser llamado el primero a la Selección Mexicana y ahora aspirar a campeón del Apertura 2024 con Cruz Azul.
Papá del Chuletita Orozco les abrió las puertas de Cruz Azul
Los hermanos Darío y Luis Romo abandonaron la tradición familiar de pescador para dar sus primeros pasos como futbolistas en el Club Deportivo El Debate, en la cancha de la colonia Tabachines, en el Estadio Navarro Escoto, instalaciones en las que el segundo se presentó a los tres años en la categoría Chupones y lo hizo con gol. No obstante, todo cambió cuando el papá del Chuletita Orozco aprovechó los contactos que tenía en Cruz Azul para llevárselos a hacer pruebas a La Noria, donde el segundo podría ser campeón en este Apertura 2024.
“Nuestra historia está ligada a la de otro par de hermanos que jugaron en Primera División. A mí me tocó tener la fortuna de estar en la primaria con Javier Orozco. La verdad, yo no conocía nada del futbol y por casualidad, cosas del destino, me toca estar en la primaria con él y a la edad de ocho años sacan una selección de la primaria, donde me toca estar junto con Javier”, reconoce ahora Darío, quien añade que “los mismos entrenadores que tuve yo, los tuvo Luis. El Chuleta fue parte importante para llevarlo a probarse al Cruz Azul y ahí empezó su camino”.
De pescador podría ser campeón con Cruz Azul
Lo cierto es que ese golpe de suerte en la primaria le cambió la vida a Luis Romo, cuyo destino era mantener viva la tradición de varias generaciones de su familia, pues su papá, abuelo y tíos se ganaban el sustento por medio de la pesca de ostiones, pero ahora y tras ser llamado a la Selección Mexicana podría convertirse en campeón con Cruz Azul, que se verá las caras en semifinales del Apertura 2024 contra las Águilas del América.
“Mi papá, trabajador desde siempre. Mi mamá, pues ama de casa y costurera. No teníamos un acercamiento al deporte. La verdad, éramos una familia de trabajo. Mi familia toda es trabajadora del mar, pescadores. Mi papá ostionero, tíos ostioneros, abuelo ostionero y conmigo empieza un poco el acercamiento al futbol”, culmina el mayor de los Romo, Darío, a quien le siguen Cinthya, Karla y finalmente Luis, el más chico de toda la familia Romo.
