Si no hay drama, no saben los partidos de Cruz Azul en instancias definitivas. Con el aliento de su gente nuevamente y con un desenlace lleno de nerviosismo, el líder del Guardianes 2021 de la Liga MX consiguió el 2-1 en el Estadio Azteca contra el Toluca (3-3 global) para avanzar a las semifinales del torneo y mantener la vela prendida del título para frenar los 23 años sin levantarlo.
Volvió a escucharse el "¡Azul. azul!" de la afición en las gradas del Estadio Azteca. Desde el 7 de marzo del 2020 no entraba la afición cementera a un partido de La Máquina, en aquella ocasión en un duelo contra Xolos de Tijuana, en la jornada 9 de aquel torneo que quedó inconcluso y en el que el equipo marchaba superlíder. Ahora la gente volvió con su equipo en Liguilla, con un marcador en contra, pero con las ilusiones casi intactas desde aquel momento en el coronavirus interrumpió la presencia de la gente en el Coloso de Santa Úrsula.
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Asedio total del Cruz Azul en los primeros 10 minutos de partido, pero pese a ello, Toluca disparó en dos ocasiones al arco, apenas desviados y vigilados por el lance de Jesús Corona. Pero al minuto nueve, vino el premio a la presión azul: centro de Jonathan Rodríguez que no alcanzó a rematar el Piojo Alvarado, pero sí Bryan Agulo, quien sólo empujó para empatar el global.
Pero poco duró el gusto. Rubens Sambueza apareció con un centro de tres dedos para que Alexis Canelo le ganara la espalda a Juan Escobar y rematara dentro del área, picado con pie izquierdo, para vencer al arquero. Desde ahí se emparejó el partido, Cruz Azul seguía con la pelota, intentó y tuvo un par de ocasiones, ambas con Angulo, pero no se concretaron. Toluca, llegó también aunque con menos claridad.
El portero de los Diablos Rojos fue exigido al 36. Primero con un manotazo para mandar a tiro de esquina un remate de cabeza de Pablo Aguilar, después, en ese cobro, el balón quedó pleno para que sacara con ambas manos un trallazo de Roberto Alvarado y con la pierna derecha un recentro de Angulo para enfriar las acciones y evitar el segundo de los cementeros.
En la segunda parte, Cruz Azul fue paciente, mantuvo la calma y el balón en sus pies. Consiguió que Rubens Sambueza ya no tuviera tanto contacto con la pelota y le cerraron la llave a la creación de juego del Toluca. Juan Reynoso hizo tres cambios ofensivos en una sola oportunidad para dejar claro que se iba a morir en la raya: Elías Hernández, Santiago Jiménez y Nacho Rivero. Después también ingresó Misael Domínguez, quien fue determinante para el gol del pase.
Taquito del chaparrón elemento de La Máquina, para habilitar a Luis Romo, que al momento de perfilarse para sacar disparo en el área, José Juan Vázquez trabó al mediocampista para cometer penal. Cabecita Rodríguez se perfiló, tomó carrera y resbaló, pero alcanzó a mandar la pelota al fondo para hacer el tanto del pase a semifinales.
Pero no Toluca no dejó de probar. La Máquina cedió un poco y los Diablos Rojos se fueron al frente. Todas las pelotas bucaron a Sambueza, pero el mago choricero no pudo darle el toque con la varita mágica al Toluca para hacer un gol que matara las ilusiones de Cruz Azul una vez más. Al contrario, en una descolgada apareció el tercero de los cementeros, obra de Santiago Giménez en tiempo de compensación.
Puebla y Cruz Azul son los dos primeros semifinalistas del torneo, a la espera de lo que pase en los partidos del domingo para conocer a sus rivales. América y Monterrey —ambos con desventajas en el global— deberán revertir sus marcadores globales para tener a los cuatro mejores equipos del torneo en los duelos por el pase a la final
FDR