Aunque no parezca importante, la coordinación y el equilibrio son fundamentales para el cuerpo, más cuando tenemos pensado fortalecerlo. A veces no se nota la deficiencia en estos aspectos, ya que no se proyectan en la figura o el físico, pero tiene que ver más con el funcionamiento motriz.
El tema de la edad puede ser un factor para ir perdiendo estas capacidades, pero en muchas personas nunca se han manifestado de buena manera.
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Aunque parezca algo sencillo, mantener el equilibrio conlleva el esfuerzo de varios músculos del cuerpo. Asimismo, para la coordinación debes estar alerta y utilizar varios músculos a la vez, incluso al momento de realizar distintas actividades de la vida diaria.
Por ello, aquí te traemos algunos ejercicios que te pueden servir para trabajar coordinación y equilibrio.
Balance en un solo pie
Levanta tu rodilla hasta la cadera y mantenla el mayor tiempo posible en un ángulo de 90 grados. Procura que tus piernas no se toquen. Como los resultados serán paulatinos, al principio puedes aguantarte de algún objeto estable como una mesa o silla. Cuando te sientas familiarizado con el ejercicio, ve soltando tu referente de equilibrio hasta que puedas hacerlo sin tener que aguantarte.
Balance en superficie inestable
Una vez hayas dominado el ejercicio anterior, intenta lo mismo en una superficie que no sea tan estable. Prueba sobre una almohada y con los ojos cerrados. Esto te permitirá mantener equilibrio cuando camines por superficies que sean imperfectas. También puedes usar un balón BOSU para practicar.
Ejercicio en el piso
Con rodillas y manos en el piso, estira una mano frente a ti y la pierna opuesta en el aire, detrás de ti. Contrae los músculos para ayudarte a mantener el equilibrio y repítelo con el otro lado.
Brincar sirve
Comienza de pie, salta en un lugar y da media vuelta tratando de caer sin perder el equilibrio. Luego, poco a poco, trata de lograr brincar y dar una vuelta completa manteniendo el equilibrio.
También en línea
Sobre una madera fina o una fila de bloques, trata de caminar colocando un pie delante de otro sin caerte. Hazlo hacia adelante y hacia atrás.
Con estos ejercicios, realizándolos de manera constante, verás que tu equilibrio y coordinación mejoran con el paso del tiempo.
FDR