Saúl Álvarez y Terence Crawford encenderán Las Vegas en una histórica súper pelea que ya comienza a generar gran expectativa. Dos de los mejores libra por libra del planeta se enfrentarán el próximo 12 de septiembre en el Allegiant Stadium, en un combate que promete ser uno de los más grandes en la historia del boxeo. Más allá del impacto deportivo, el evento también representará un giro mediático y comercial con la incursión de nuevas figuras en su organización.
La pelea marcará el debut de la nueva división de boxeo de TKO Group, respaldada por Turki Al-Alshikh y con Dana White al frente de la producción y promoción. Esta alianza representa una renovación en el modelo de negocio del boxeo, con el objetivo de modernizar el espectáculo y acercarlo a los estándares que ha impuesto la UFC en la última década.
El componente económico también juega un papel central: se estima que la bolsa total superará los 200 millones de dólares, con 150 millones destinados a "Canelo" y 50 millones para Crawford. La cifra refleja la trascendencia de este combate, potenciada por el músculo financiero saudí y el atractivo internacional de ambos peleadores.
Dana White salta del octágono al cuadrilátero
Por primera vez, Dana White, presidente de la UFC, estará a cargo de promocionar una pelea de boxeo. Y no se trata de cualquier combate, sino del enfrentamiento entre dos figuras estelares como el campeón mundial tapatío y el estadounidense.
White se encargará de la promoción, producción, operaciones del evento y manejo de medios, replicando el exitoso modelo que ha convertido a la Ultimate Fighting Championship en una potencia global. “Este es uno de los combates más grandes de la historia, y es un honor absoluto promocionarlo”, declaró.
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Un nuevo capítulo para el boxeo internacional
TKO Group, bajo la visión de Mark Shapiro, trabaja junto a ambos mandamás para lanzar una nueva marca de boxeo, cuyo nombre oficial será revelado en breve, con el objetivo de revolucionar el deporte.
Se trata de una estructura independiente de la UFC, pero que aplicará la misma lógica empresarial para elevar el nivel de producción, comercialización y experiencia del espectador. Canelo, por su parte, se mostró entusiasmado: “Es algo nuevo para mí, y creo que con Dana va a ser un gran momento”, afirmó.
